Antes del programa hicimos sesiones individuales. El cambio más bestia lo he hecho con el programa, porque ha sido dónde realmente he aprendido herramientas.
Llegué a ti que me temblaban los brazos cuando estaba solo, sentía vacío. Ahora, cuando estoy solo, estoy bien, y me he posicionado en el YO DECIDO.
El programa me ha permitido trabajar más para mí. Las sesiones que están incluídas fan “click” y desencallan. Los audios que mandas van muy bien.
Para mí lo más brutal es trabajar yo mismo. Después hacías unos audios que te hacían “clack” y me venían unos: “¡Qué cabrona! ¡Directa al clavo!
Es tener un acompañamiento personalizado, pero no quiero decirle acompañamiento porque es más superficial, tú no estás acompañando, TÚ ENTRAS DENTRO, se me queda corto decir que tú acompañas. Es un trabajo en conjunto desde el interior, guiada por una experta como tú.
No sólo es Coaching. Nos das el material para: “La facultad de la vida”. Si te quieres sacar un Máster en tener decisión sobre tu interior, te lo sacas sin recrearte en la casuística. Te veo haciendo escuela.